Según Shannon, 2013:
Ser una persona “inteligente” puede significar tener una gran capacidad memorística, tener un amplio conocimiento, pero también puede referirse a la capacidad de conseguir convencer a los demás, saber estar, expresar de forma adecuada sus ideas ya sea con las palabras o con cualquier otro medio de índole artístico, controlar su ira, o saber localizar lo que se quiere, es decir, significa saber solucionar distintos problemas en distintos ámbitos. Además, la formación integral de los alumnos ha de entenderse también como la formación de lo emocional y no sólo como formación de lo cognitivo.
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En síntesis, la inteligencia no solo hace referencia a lo cognitivo, a la capacidad intelectual como muchos le han dado énfasis, sino que, ser inteligente se refiere a algo más profundo, más amplio. Según la Teoría de Gardner, comprende un sinfín de talentos, habilidades y capacidades mentales.
Pero no todas las personas poseemos la misma capacidad para aprender sin embargo sí podemos tener varias de estas inteligencias bien desarrolladas, y apropiarnos de ellas para solucionar problemas en la vida cotidiana, de una manera diferente a como lo haría otro individuo; Se afirma por tanto que la ejecución de los roles en la sociedad requiere de la combinación de más de una inteligencia, por lo que podemos decir que todos los individuos son inteligentes de una u otra forma, no obstante uno tiene una inteligencia o varias inteligencias más desarrolladas que las demás.